21 jun 2011

Analisis profundo y desmenuzado de la lirica músical atemporal y sus efectos en el subsconsciente. (Entrega güan)

O "Música que da yuyu".
Rescato hoy el tema del analisis músical que ya comencé en un post anterior (buscadlo, coñe, que solo hay que navegar por tres años de posts chorras. Ahora me direis que teneis algo mejor que hacer...), en un nuevo intento por desmostrar que la industria musical quiere arruinarnos las neuronas a todos en un complejo complot que acabará cuando las empanadillas dominen el mundo. O algo.
Pero venga, empiezo con esto, y empiezo desmenuzando una canción infantil, concretamente una de Fofito, cuyo nombre fue idea de Carmen Hornillos: "Mai Sei for Yuti".
Bien. Atención, porque la letra de esta canción es tan tremendamente compleja, asi que voy a analizarla estrofa por estrofa. Ni siquiera estoy seguro de lo que es una estrofa, pero suena a termino músical complejo. Dejemoslo mejor en cacho por cacho. (Cachete con cachete, pechito con pechito~... perdón)
Primer cacho:
"Mai sei for yuti
tu eres alta
mai sei for yuti tu eres tu
badabadu
badabadu."
Bien. Por lo que podemos deducir de este trozo, signifique lo que signifique "Mai sei for yuti", se refiere a una chica alta (como una que yo me se) y que siendo ella, es ella, alta al cubo. Hasta aqui ya podemos ver que la logica es aplastante, casi podria parecer que la he escrito yo. Pero en la siguiente estrofa, todo pierde su sentido:
"La sinagoga
domenica la chucha
domenica la chucha
tu eres tu
badabadu.
badabadu. "
Vale. Lo de la sinagoga lo aceptamos, la chica alta al cubo puede ser judia, aqui no discriminamos a nadie. Pero lo de "Domenica la chucha"... Señor Fofito, deje de aterrar niños. Sobre todo porque si metes "Domenica la chucha" en Google, todo son referencias a fotologs.
He aqui la conclusión irremediable: Fofito quiere crear una nueva raza de chonis altas judias para dominarnos a todos los bajitos de religión inclasificable. ¡Que alguien haga algo!
Saltamos a una de Pimpinela, el primer duo de cantantes que demostró que partirle los dientes a tu compañero sin dejar de cantar es posible. En concreto, 'La familia', que me ha ayudado a comprobar que en el fondo, mi familia no es tan mala. Cachos al azar:

"Si te tiran con un corcho, o al pasar te pisa un niño,
En el fondo es tan solo una muestra de cariño..."
Vale que estos dos estaban a hostias todo el rato, ahi, pim pam, pero para mi que lo que es el termino "cariño" lo tienen un poco alterado. Creo que en la versión beta, la siguiente estrofa era "Y si te apuñalan con el sacacorchos, o te plantan la carne recién sacada de la barbacoa en la espalda, es que te quieren con todo el alma"
(Ey, rimo "alda" con "alma". Supera esto, Mecano)
"Cuando griten no te asustes, es que viene la comida..."
Mira que mi familia es bestia, porque son de chillar mucho, pero vamos, yo no me imagino una conversación así:
-¿Y que opinas del efecto del cambio climatico en el apareamiento de los mejillones?"
-Indudablemente, es un interesante tema de conversación... verás, yo creo que... ¡LOS PISTACHOS! ¡PACO, QUE LA ABUELA HA TRAIDO PISTACHOS! ¡RAPIDO, TRAE LA CÁMARA! ¡QUE SE PONGAN LAS NIÑAS AL LADO! ¡PISTACHOS, FAMILIA, PISTACHOS! ¡PISTACHOS, OE, PISTACHOS, OA!
Proximamente, mas canciones en su blog favorito... no, en el de las imagenes porno gratis no, en este. Mientras tanto, dejo una ultima reflexión: letristas, si no se os curre nada, no escribais canciones. Pero no hagais lo mismo que hicieron con "We Go Together" de Grease. Porque una cosa es disimular los huecos de la cancion haciendo de tartamudos, y otra llenar treinta segundos de canción así:
"
Ra-ma la-ma la-ma ka ding a da ding de dong
Shoo-bop sha wad-da wad-da yipp-it-y boom de boom
Chang chang chang-it-ty chang shoo-bop
Dip da-dip da-dip doo-wop da doo-bee doo
Boog-e-dy boog-e-dy boog-e-dy boog-ed-y
Shoo-by doo-wop she-bop
Sha-na-na-na-na-na-na-na yip-pit-y boom de boom
Ra-ma la-ma la-ma ka ding-a de ding de dong
Shoo-bop sha wad-da wad-da yipp-it-y boom de boom
Chang chang chang-it-ty chang shoo-bop
Dip da-dip da-dip doo-wop da doo-bee doo
Boog-e-dy boog-e-dy boog-e-dy boog-e-dy
shoo-by doo-wop she-bop
Sha-na-na-na-na-na-na-na yip-pit-ty boom de boom"
Hasta la proxima. A guan bam barumba baram bam bum.

28 may 2011

El engaño de las grandes superficies

Habitualmente disfruto metiendome en la web de FNAC a apuntar cosicas que gorronear a la familia en mi cumple, pero mientras hacia mi habitual lectura de posts de hace cuatro años (yo siempre a la ultima con todo) descubrí la verdad. FNAC no existe. Y al ultimo comentario de este post del siempre recomendable Blog de Manu me remito:
"este es un mensaje para toda la gente latina como yo y no esten creyendo tonterias de internet porque no existe esa tal fnac"
Asi que ya sabeis, pillad antorchas y todos a quemar las falsas sucursales de FNAC.

12 may 2011

Por Lorca


Sobran las palabras.

8 may 2011

Black Books

Black Books es una serie que descubrí hace no mucho. Una sit-com inglesa (comedia de situación) que habla sobre el día a día en una librería pequeña con libros de segunda mano. ¿Hasta ahí todo normal, no? Como se nota que no me conocéis…
¿Dónde esta la gracia? Os preguntareis. Bien, la gracia esta en los personajes.
Bernard Black: Es el protagonista y propietario de la tienda. Un escocés alcoholizado y fumador con un carácter más ácido que chupar un limón. No le gustan los clientes, ni siquiera le importa vender o no libros, solo quiere que le dejen en paz de una vez y martirizar a Manny, su ayudante. Es un personaje triste, desgraciado y derrotado. Es como House pero aún mejor.
Manny: El ayudante de Bernard, la historia comienza cuando le contratan y a partir de ahí narran el día a día de la tienda. Es un hombre bien intencionado, con pintas raras y sin ambición que procura que Bernard no se mate un día de estos y que la mierda no les coma (literalmente).
Fran: Es la amiga más vieja de Bernard, una solterona que no se rinde y que mantiene a raya al protagonista para evitar que se cargue a Manny en uno de sus impulsos. Pese a lo que parezca, sus habitos son como los de Bernard.
Coge a estos tres y les metes en una librería chiquitina. Añade libros y especies de monstruos nuevas que han crecido en la mugre y que habitan en las estanterías y tienes una serie sin igual.
Es la mejor sit-com que he llegado a ver en mucho tiempo. Si te gusta el humor inglés te encantara, sino seguramente también.
Otra ventaja, por llamarla de algún modo, es que es cortita. Son solo tres temporadas de seis capítulos cada una. La serie conserva la frescura de principio a fin sin perder esa naturalidad y sin llegar a cansar.
Os dejo con uno de los diálogos que más me gustó:
Manny le da unos plátanos a Fran después de que ella decida quedarse a dormir en la habitación de Bernard.
Fran: No gracias, no tengo hambre
Manny: Oh no, no son para ti. Simplemente ponlos debajo de la cama.
Fran: … Por qué? Qué hay debajo de la cama?
Manny: No lo sabemos. Nosotros solo le llamamos… “La Cosa” ”

3 may 2011

Epoca de cambios

Siempre he mantenido que la vida son ciclos, como los programas de las lavadoras, y que tarde o temprano esos ciclos acaban para dar paso a una nueva etapa.
Pasa con todo, y los blogs no son una excepción.
El monólogo anterior fue el ultimo monólogo publicado en este blog.
Tengo diversas razones para ello, pero la mas importante, es que tengo intencion de realizar una serie de actuaciones dentro de unos meses si todo va como debiera ir, y en aras de evitar la sensación de repetición en el publico, no pueden seguir aireados como si tal cosa los monólogos que tenga intención de relatar.
No voy a borrar los que ya he publicado, ni tampoco dejar de escribir en el blog. Como ya he dicho, se inicia una nueva etapa en la que pienso seguir siendo fiel a mi estilo, aunque cambie el formato, el espiritu de los escritos va a seguir ahi.
Quiero dar gracias a la pequeña comunidad de "fans", por asi decirlo, que me han apoyado, y espero sigan haciendolo, en mi labor comica durante este tiempo, asi como a mis amigas y compañeras de blog, quienes sin su aprobación de mi primer monólogo nunca me hubiese animado a seguir escribiendo.
No hay mejor sensación que conseguir que alguien se ria con algo que tu has escrito, y espero que los que hasta ahora han llegado a este blog riendose con mis monólogos sigan haciendolo con mis futuros escritos, y con las posibles actuaciones que podrian acabar en Youtube y que promocionaré descaradamente en este rinconcito de Internet que para eso es mio al 15% mas menos.
Gracias.
Ha sido un placer.

25 mar 2011

Monólogo: Juguetes que nunca quise

Hoy voy a hablar de un tema divertido, para variar.

Quiero hablar de algo que nos ha entretenido a todos en nuestra juventud, compañeros fieles de aventuras en la vida. No, no estoy hablando de las revistas porno, me estoy refiriendo ni más ni menos que a los juguetes.

Los juguetes, por si alguien acaba de despertarse de un coma de 300 años (que ya de por sí tiene merito) y no lo recuerda, son esos pequeños chismes de mil diversos usos que tienden a romperse en cuanto los usas mas de una vez.

En concreto, hoy quiero hablar de juguetes inútiles, juguetes cuya razón de existir es un completo misterio para mi, y probablemente para su inventor también, si no hubiese estado borracho el día que se le ocurrió inventarlos.

Empezaré por el que para mí es el más desconcertante: el hulahop desmontable. Ese aro que va por piezas, y que teóricamente sirve para moverlo en la cintura como si fueses una bailarina de la danza del vientre (llamada así porque su precursor fue Falete, que otra cosa no, pero vientre tiene de sobra) y dar giros por ahí como quien no quiere la cosa, pero la realidad es bien distinta.

Tu montabas el arito, te lo pasabas por la cintura, empezabas a girar como si te hubieses sentado sin pantalones en mitad de un hormiguero de hormigas caníbales… y al primer remeneo eso se desmonta y se queda hecho un montón de piezas otra vez, que te dan ganas de volver a meterlo en la caja y guardarlo en un armario porque ya ha cumplido el ciclo de la vida.

Pero no, como a ti a cabezón no te gana nadie, vuelves a montarlo, lo aprietas bien, te aseguras de que no quede ningún resquicio suelto… y en cuanto le sueltas una mano para pasártelo por la cabeza, se abre.

— ¡Nada, no pasa nada!—

Le pones un poquito de celo (vulgo esa cosa transparente que pega, comúnmente conocida aquí en Murcia como fixo) en las partes que se unen, y hala, ya eres feliz. Eres feliz exactamente el tiempo que tarda en partirse otra vez, tiempo en el que a ti te da tiempo de cagarte en todos y cada uno de los empleados de Mattel.

No te esfuerces, hipotético amigo mío. Aunque le eches Superglue, ese aro va a seguir partiéndose, está programado para ello, es como Terminator pero de plástico del malo. Eso si, arde que te cagas. Dejo a tu imaginación lo que puedes hacer para vengarte.

Otro juguete que yo nunca he terminado de entender del todo es la comba. Quizás el hecho de ser inútil integral me ha causado un ligero rechazo hacia este juguete, pero sigo sin encontrarle la diversión a algo que básicamente consiste en pegarte latigazos en el culo con una cuerda.

¿Que no es así? Pues yo no conseguía hacer otra cosa… ya lo comenté en el monólogo sobre las clases de gimnasia (busquen un poquito, no se lo voy a dar todo hecho), así que no me explayare mas en eso.

Otro juguete que no soporto: los yo-yos. El yo-yo básicamente es un juguete pensado para los niños a los que sus padres no les dejan comprarse un perro.

En serio, es como un cachorrito pero en deforme, y hace más o menos el mismo caso. Tu pilla un perro, átale una correa agarrandole solo con un dedo, deja que corra y tira de la correa para atrás con el dedo, verás que caso te hace. Pues con el yo-yo lo mismo. Además, tiene una frustración interna, y es que si eres bajito como yo, antes de que te de tiempo a levantar la mano para arriba ya se la ha pegado contra el suelo. Yo tenía un yo-yo musical que al girar te deleitaba con una bonita y repetitiva música en plan politono de psicópata. Se llevó tantas leches que acabó formándose un remix:

"Piripi, piriPUNCHpiriPUNCHPUNCH piriririPUNCHpiririnch..."

Eso si, me saqué una pasta vendiéndoselo a los de una marca de atún para la banda sonora de sus anuncios.

Otro juguete que no es de mi gusto personal es la peonza.

Tamaña aberración solo puede ser pensada por una mente malvada y maquiavélica. La de Leonardo Dantes, por lo menos.

La peonza consiste básicamente en un cacho de madera con forma de testículo con una punta en… eso, en la punta, y una cuerdecita que teóricamente sirve para que el testículo se vuelva bailarín. Los cojones, nunca mejor dicho.

Mira que lo he intentado veces, pero nunca he sido capaz de hacer bailar la puñetera peonza. Aun recuerdo la ultima vez que lo intenté, con ocho años. Estaba yo felizmente en la calle con mi peonza nueva, rodeado de vecinos que si que sabían lanzarla y que querían presenciar mi bautizo de… ¿como se llama al lanzador de peonzas? ¿Peonzari? Bueno, eso. Empecé a pasar la cuerda, y venga vueltas, y venga vueltas, y venga vueltas, que me mutilé el dedo del propio roce y tuve que injertarme una salchicha frankfurt, y una vez está la peonza atada y la cuerda mas apretada que Falete en una 38, llegó el momento de lanzarla. Lo único que recuerdo de ese día es estar en un juzgado y que un señor leyese "Se le acusan los cargos de asesinato múltiple por contusiones, perforación, destrozar varios cristales, escándalo publico al rasgarse el pantalón con la cuerda..."

No recuerdo como salí de allí. Me parece que sacando un 6 en el dado.

Otro absurdo entre absurdos: el parchís. Me parece un juego horrible, asqueroso, nauseabundo, digno de destrucción, ¡a la hoguera el parchís! ¡Y su inventor! ¡Y los que juegan! ¡Todos al fuego!

(El autor informa que el párrafo anterior está escrito bajo enajenación mental transitoria provocada por trauma infantil al ser daltónico y que no ha de ser tomada como prueba en ningún tribunal. En caso de duda, consulte a su tanatopractor más cercano.)

5 mar 2011

Me abro (no, de piernas no)

Como me siento mitad inspirado mitad egocentrico, he ahi con una lista de detallitos mios, para que se la cotice mi club de fans. Reconocedlo, me adorais.
  • Tengo como 75.000 manías. Ni Monk, oye.
  • La principal es mi ritual a la hora de dormir: primero me quito las gafas, luego el reloj, me echo un trago de agua, miro la hora, y luego ya apago. No puedo apagar la luz hasta no haberlo hecho todo. En caso de interrupción del proceso, vuelvo a empezar desde el principio.
  • Le tengo especial cariño a un rizo situado en la parte inferior izquierda de la parte de atras de la cabeza, detrás de la oreja. Cuando me estreso, rizarmelo es mi forma de tranquilizarme, y ultimamente también me viene bien para inspirarme. Cuando me corto el pelo, lo dejo clarito: el rizo no se toca.
  • Nadie me ha visto enfadado de verdad. Nunca. Me prohibo a mi mismo enfadarme en presencia de gente. Y para internet lo mismo: si estoy con el Messenger o en Twitter, nunca muestro mi enfado así esté con ganas de mandarlo todo a la mierda. Ayuda mucho a evitar problemas.
  • Tiendo a mantener discusiones conmigo mismo. Es mi particular forma mental de desahogar tensiones.
  • No se muy bien por qué, pero cuando me enfado conmigo mismo (soy con quien mas veces me enfado, no me respeto nada) me insulto en segunda persona. La bipolaridad, supongo.
  • Soy timido y cobarde sin igual. Salvo excepciones, al conocer a alguien puedo tirarme hasta media hora cortado sin atreverme a abrir la boca siquiera.
Y por el momento no se me ocurren mas cosas, soy tan triste que ni para criticarme valgo... ya si eso edito luego.